DESTRUIR UN POCO EL CUERPO...





PARA LLENAR MÁS EL ALMA.

Eso fue lo que pensé mientras orinaba en el baño de un antro donde apenas
distinguia el escusado, por lo obscuro y por lo borracho que estaba.
Amo las extrañas ocasiones en que estoy dispuesto a bailar no sé que, con quien sabe quien,
querer desgastarme, cantar, bailar y no poderme moverme al día siguiente.





No hay comentarios: